La Reducción de vino tinto es una salsa elegante y sabrosa, perfecta para acompañar carnes rojas, como filetes o costillas. Es una de las salsas base en la gastronomía francesa y aunque yo no soy «salsero» esta es una de las que preparo con frecuencia porque resalta cualquier proteína. Es una receta muy fácil de preparar aunque debo decir que lleva su tiempo ya que la reducción no la debes apurar, así que te recomiendo, con tiempo organizarte para que cuando la necesites la tengas lista. Otra recomendación, es hacerla con anticipación y guardar en el; refrigerador sin problema hasta una semana. Yo cuando hago mucho, guardo en un envase hermetico en el congelador.
Aquí te dejo una receta básica para prepararla en Un Día Cualquiera cuando te quieras lucir con los tuyos:
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Ingredientes:
– 1 taza de vino tinto (preferiblemente uno de buena calidad)
– 1 taza de caldo de carne o vegetales.
– 2 cucharadas de mantequilla
– 1 cebolla pequeña o 2 chalotes, finamente picados
– 2 dientes de ajo, finamente picados
– 1 rama de tomillo
– 1 hoja de laurel
– 1 cucharada de azúcar morena o miel (opcional, para equilibrar la acidez)
– Sal y pimienta al gusto
Utensilios Necesarios:
- Olla Pequeña de fondo pesado.
- Taza de medir
- Cuchillo
- Tabla para picar
- Paleta o cuchara de cocina.
- Colador Fino de Acero Inox.
Manos a la Obra:
– En una sartén olla, derrite 1 cucharada de mantequilla a fuego medio.
– Agrega la cebolla o chalotes y el ajo, y sofríe a temperatura media hasta que estén suaves y translúcidos, alrededor de 5 minutos.
– Vierte el vino tinto en la olla y sube el fuego a medio-alto.
– Lleva a ebullición y deja que se cocine, removiendo ocasionalmente, hasta que el vino se haya reducido a la mitad. Esto debería tomar entre 10 y 15 minutos.
– Una vez que el vino se haya reducido, agrega el caldo y las hierbas (romero o tomillo y laurel).
– Continúa cocinando a fuego medio-alto hasta que la mezcla se reduzca nuevamente a la mitad, formando una salsa más espesa. Esto tomará otros 10 a 15 minutos.
– Retira la sartén del fuego y cuela la salsa para eliminar las hierbas y los trozos de cebolla y ajo.
– Regresa la salsa a la sartén, reduce el fuego a bajo y agrega la cucharada restante de mantequilla para darle un acabado sedoso y brillante.
– Si la salsa está muy ácida, puedes agregar el azúcar morena o la miel para equilibrar el sabor. Ajusta la sal y la pimienta al gusto.
– La salsa debe tener una consistencia ligeramente espesa y brillante. Viértela sobre la carne justo antes de servir.
Tips:
- Usa un vino tinto que te guste beber, ya que el sabor se intensificará en la reducción.
- Puedes experimentar con diferentes hierbas o incluso añadir una cucharada de vinagre balsámico o de Vino de Jerez para un toque adicional de sabor.
- agregar champiñones rebanados después de colar la salsa, te dará otra opción.
- Sustituye el vino tinto por blanco, y tendrás una salsa muy rica para tu pollo o pescado.
- Guarda en el congelador en un envase hermético, y la ten dras lista para un antojo.
Esta reducción de vino tinto es rica y compleja, ideal para darle un toque especial a cualquier comida y perfecta para acompañar un rico pernil al horno como el que te dejo en este link.
Recuerden, vivan la experiencia en positivo y disfruten de los resultados!
